jueves, 11 de octubre de 2012

Se me queda grande, mi propia piel...

Sabía que iba a ser duro, pero no podía imaginar cuanto... Puede ser una tontería, pero me duele estar al otro lado, como si me hubieran quitado la piel y viera a alguien vivir con ella lo que antes yo vivía. Cuando me lo propuse, sabía que me costaría mucho, pero no que podría conmigo. ¿Lágrimas? Jamás pensé que llegaría a ese extremo ¿Como lucho contra ello? ¿Me encierro cada vez que choque contra mí? No puedo rehuirlo, tiene dentro de sí demasiadas cosas que adoro, demasiadas partes de mí. ¿Me rindo? Ahora no es el momento de volver hacia atrás. ¿O sí? ¿Podré volver sobre mis pasos y romper con aquello que un día dije? ¿Qué me hará más daño, volver sobre mis pasos, o resistir y llorar? Ayúdame, tu que me conoces, que me miras cada día, que me ves, que sabes como me siento. Desde ahí arriba, desde donde eres tan grande, ayúdame a no sentirme tan pequeña, porque siento que se me ha quedado grande mi propia piel y se me están clavando poco a poco cada una de las palabras que dije aquel día...

2 comentarios:

kkmola dijo...

Niña no le des tantas vueltas, cuando termine este curso podrás hacer eso que quieres, ahora preocúpate por estudiar y por sacarlo todo adelante...

cecilia cisneros arenas dijo...

ainss kk... ya...